Si a Brittany Arroyo le hubieran dicho a sus once años que ella guiaría a otros a adorar en español y alentaría a otros a no estar atados por sus inseguridades, probablemente no lo creería.. Brittany tiene una historia única de haber sido criada entre la cultura latina, pero ella misma no es una latina. “Soy latina de corazón” es lo que ella dice. Creció en un ambiente de iglesia donde los viejos coritos eran la lista normal de cada servicio. Le encantaba cantar, así que se unió al coro de su iglesia cuando tenía 11 años. Siendo muy joven e ingenua, no estaba preparada para lo que Dios había planeado para ella. Alrededor de los 16 años comenzó a enfrentar muchos desafíos cuando se le pidió que liderara las canciones. Brittany no hablaba español con fluidez cuando era niña. Los miembros de la Iglesia le hablaban en
español y ella se comunicaba aquí y allá, pero también aceptaban su inglés. Brittany se volvió apasionada y tomó más en serio el idioma en la escuela secundaria. Tomó cursos de español durante la escuela secundaria, preparatoria y la universidad para poder aprender el idioma, específicamente el aspecto gramático. Eventualmente se graduó con su sub especialidad en español. Ella usó esas herramientas para comunicarse con la familia de su iglesia al dirigir y también al escribir música. Cuando Brittany tenía 20 años asumió el papel de codirigir un equipo de adoración en Centro Vida con Miguel Hernández.

La capacidad de cantar y llevar una canción no fue el mayor desafío, el mayor desafío fue conectarse con la familia de la iglesia y comunicar sus pensamientos en español. “El miedo se apoderaba de su mente diciéndole que no estaba lo suficientemente calificada. Estaba demasiado asustada para hablar porque los pensamientos de ella eran que no le entenderían que no tenia sentido lo que
decía. Una frase que le he dado el valor para seguir adelante fue “Dios no llama a los calificados, pero califica a los llamados”. Los últimos 3 años Brittany ha superado sus inseguridades y temores de no sentirse lo suficientemente calificada. Aunque su español no es perfecto y todavía está aprendiendo, ve la importancia de hablar o cantar las melodías que el Señor ha puesto en su corazón. Esas palabras podrían dar fe a un alma quebrantada o dar esperanza a alguien que quiera rendirse. Puede que sea una frase quebrada en español de su boca, pero Dios aclara el mensaje. A veces, sus inseguridades se apoderarán de ella, pero Dios brilla a través de una persona o una señal que le recuerda que está haciendo
exactamente lo que Él la llamó a hacer. Su primer sencillo “Levántate y Anda” nació de la idea de no sentirse calificado como cantante o compositor. Entonces Dios le recordó maravillosamente que todo lo que Él quiere es que su vida sea Su vaso y Él proveerá todo lo demás. Ella todavía está en el hermoso trayecto de escribir música y continúa desarrollando todos sus talentos y dones para entregándoselos de regreso a su Creador.